CUANDO MUERA QUIERO SER UN ARBOL

Falta una eternidad de poemas
pero es mi manera de sentirme oxígeno
hoy doy bocanada a quien necesite
un día seré polvo
me mezclaré con la tierra
seremos un solo cuerpo
ahí quiero yo una semilla
un árbol perenne.

No quiero estar en el rango de lo abrazable
que mi follaje no sea motivo
me suma importancia
lo mío es ser útil
donde nadie me vea
para no ser talada.

En definitiva daré morada a pajaritos
quizás lleguemos a un acuerdo
y ellos me canten
(mejor ellos que yo)
emanaré oxigeno
atraparé todos tus desechos
así tu respirar sea un desperdicio.

Seré un embalse
con esta represa de madera
los insectos se guardan de la lluvia,
alimentaré pueblos enteros
un sabor frutal será mi vaho permanente
le diré erosión hoy no te toca.

Después de décadas podría convertirme en un libro
por mero azar este poema estará en él
nacido de él muriendo en él
quien pensaría que el poema podría ser
el mismo árbol que hoy conjuro.

No quiero estar en una zona gélida
no volaría tan lejos
seguro seré tropical,
tampoco que me pinten o me echen cal
lucecitas de navidad ni pensarlo,
una casa en mí es factible
la risa de los niños es algo que no estoy
dispuesta a perder ni muriendo
tal como conservo la imaginación,
pero no quiero caer y causar muertes
solo anhelo ser un árbol feliz,
ya con eso y con mi fotosíntesis
es suficiente.

Victoria Monsalve, 2016.